Fideuá Mixta
Para 4 personas
300g fideos huecos
200g contramuslos de pollo deshuesados
50g gambas peladas
100g sepia
1 tomate
1 cebolla
1/2 pimiento verde
2 dientes de ajo
Caldo de pescado
Aceite de oliva
Sal
Azafrán
Para empezar, picamos todos los ingredientes. Las verduras en trocitos pequeños y el pollo y la sepia, en trozos más grandes para poder pincharlos bien.
En la foto os presento los ingredientes para que visualmente os hagáis una idea. Para esta fideuá en concreto, no tuve tiempo de preparar un caldo de pescado en condiciones por lo que utilicé la Base para cocinar de Gallina Blanca.
No está de más tener un brick o dos de estos en la despensa ya que te sacan de un apuro. Si planificamos con un poco más de tiempo...podemos preparar nosotros mismos el caldo con las cabezas de las gambas, alguna espina de pescado y algo de perejil (¡como Arguiñano!).
En una sartén grande o una paella si tenemos, añadimos aceite y doramos el pollo. No hace falta que esté hecho por dentro, ya que luego, con la cocción, terminará de hacerse. Lo retiramos a un plato y empezamos a hacer el sofrito.
En el mismo aceite, doramos el ajito picado en láminas finas, añadimos la cebolla y cuando empiece a ponerse transparente, el pimiento verde. Dejamos todo unos minutos y por último, añadimos el tomate (pelado y sin pepitas).
Este es el sofrito de toda la vida, pero podemos añadir las hortalizas y verduras que queramos: judías verdes, guisantes, champiñones....
Una vez que empiece a deshacerse el tomate, ponemos la sepia cortadita y el pollo que habíamos reservado antes.
Como véis, aún no he añadido sal, ya que el caldo que usaremos ya tiene sal. Es mejor rectificar al final que no lamentar una fideuá salada.
Añadimos las gambas peladas y los fideos huecos y mezclamos unos segundos.
Lo bueno de estos fideos es que se hacen muy rápido, por lo que en seguida añadiremos el caldo y unas hebras de azafrán para dar sabor y color.
Sólo nos queda esperar unos 10 minutos hasta que se hagan los fideos.
Otra cuestión es la cantidad de caldo a añadir. Ahí va en gustos, ya que conozco a quienes les gusta caldosa y a quienes les gusta tirando a seca...
Yo lo hago a ojo, la verdad. Si veo que le falta un poco...voy añadiendo para no pasarme. Con los fideos no pasa nada si se corta la cocción durante unos segundos y así no pecamos de hacer una fideuá inundada.
Para que quedara bonito, puse un poco de perejil picado que tengo siempre en el congelador. Cuando el pescadero me da manojos y manojos, lo pico bien y lo meto en el congelador.
Cuando lo vas a usar, sobre todo en cosas calientes, se descongela en un instante y está igual que recien picado así que... ahí os dejo mi fideuá mixta. Espero que os guste y os animéis a prepararla.
En la foto os presento los ingredientes para que visualmente os hagáis una idea. Para esta fideuá en concreto, no tuve tiempo de preparar un caldo de pescado en condiciones por lo que utilicé la Base para cocinar de Gallina Blanca.
No está de más tener un brick o dos de estos en la despensa ya que te sacan de un apuro. Si planificamos con un poco más de tiempo...podemos preparar nosotros mismos el caldo con las cabezas de las gambas, alguna espina de pescado y algo de perejil (¡como Arguiñano!).
En una sartén grande o una paella si tenemos, añadimos aceite y doramos el pollo. No hace falta que esté hecho por dentro, ya que luego, con la cocción, terminará de hacerse. Lo retiramos a un plato y empezamos a hacer el sofrito.
En el mismo aceite, doramos el ajito picado en láminas finas, añadimos la cebolla y cuando empiece a ponerse transparente, el pimiento verde. Dejamos todo unos minutos y por último, añadimos el tomate (pelado y sin pepitas).
Este es el sofrito de toda la vida, pero podemos añadir las hortalizas y verduras que queramos: judías verdes, guisantes, champiñones....
Una vez que empiece a deshacerse el tomate, ponemos la sepia cortadita y el pollo que habíamos reservado antes.
Como véis, aún no he añadido sal, ya que el caldo que usaremos ya tiene sal. Es mejor rectificar al final que no lamentar una fideuá salada.
Añadimos las gambas peladas y los fideos huecos y mezclamos unos segundos.
Lo bueno de estos fideos es que se hacen muy rápido, por lo que en seguida añadiremos el caldo y unas hebras de azafrán para dar sabor y color.
Sólo nos queda esperar unos 10 minutos hasta que se hagan los fideos.
Otra cuestión es la cantidad de caldo a añadir. Ahí va en gustos, ya que conozco a quienes les gusta caldosa y a quienes les gusta tirando a seca...
Yo lo hago a ojo, la verdad. Si veo que le falta un poco...voy añadiendo para no pasarme. Con los fideos no pasa nada si se corta la cocción durante unos segundos y así no pecamos de hacer una fideuá inundada.
Para que quedara bonito, puse un poco de perejil picado que tengo siempre en el congelador. Cuando el pescadero me da manojos y manojos, lo pico bien y lo meto en el congelador.
Cuando lo vas a usar, sobre todo en cosas calientes, se descongela en un instante y está igual que recien picado así que... ahí os dejo mi fideuá mixta. Espero que os guste y os animéis a prepararla.
Yo cocino, tú cocinas....¡Todos cocinamos!
Esta fideguaaaaaa tiene una pintaaaa mmmmm.... Se la voy hacer a sergioooo jejjeje se va a enterar!!!! Jijiji
ResponderEliminaryo la hare el domingo para que me des el aprobado jajajaja un besazooooooo
ResponderEliminarQué rica y qué facilita... El próximo sábado la hago ;-)
ResponderEliminarHola Pinxenxa ¿Es ese tu nombre? Vengo del blog dandole al diente y me ha picado la curiosidad al ver tu foto.
ResponderEliminarMe encuentro con una rica fideua y con un blog nuevecito al que hay que hacer crecer. Espero que me visites algún dia!!!!